El padre Federico Lombardi, director de la Oficina de Prensa del Vaticano, ha enviado un comunicado en relación a la detención esta mañana de monseñor Nunzio Scarano en el que se informa dicho prelado había sido suspendido del servicio de la APSA (Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica) ya de hace más de un mes, apenas los superiores fueron informados de que existían irregularidades por las que estaba siendo investigado.

En conformidad con cuanto previsto en la Reglamento de la Curia Romana, se le impuso  la suspensión cautelar, como corresponde a las personas a quienes se les inicia una acción penal.

La Santa Sede no ha recibido todavía ninguna solicitud sobre la cuestión por parte de las autoridades competentes italianas, pero confirma su disponibilidad para una plena colaboración, en conformidad a las reformas iniciadas por el papa Benedicto XVI y proseguidas por Francisco. 

La autoridad competente vaticana, la AIF (Autoridad de Información Financiera), "está pendiente del problema, y en caso de que sea necesario, tomar las medidas apropiadas a su competencia", indicó la Oficina de Prensa.

En algunos medios de comunicación italianos han informado erróneamente que monseñor Nuncio Scarano era obispo de Salerno. Desde la página web de la diócesis han emitido un comunicado para desmentir la noticia. El obispo de Salerno es monseñor Luigi Moretti.

La fiscalía de Roma ha ordenado la detención de monseñor Scarano; también de Giovanni Maria Zito, ex-agente de los servicios secretos italianos (AISI), ya destituido hace algunos meses de su cargo; y de Giovanni Carinzo, un intermediario financiero.

Los hechos se producen tan solo dos días después que el papa Francisco hiciera pública el nombramiento de una comisión para estudiar la reforma del IOR (Instituto para las Obras de Religión: http://www.zenit.org/es/articles/el-santo-padre-nombra-comision-para-estudiar-la-reforma-del-ior