En la fiesta del Bautismo del Señor, el papa Francisco celebró este domingo, a las 9.30 horas, la Santa Misa y bautizó a 26 niños en la Capilla Sixtina del Palacio Apostólico. En un ambiente de ternura y mucha emoción, con algún llanto de los bebés de fondo, el Santo Padre preguntó a los padres qué nombre dan a los pequeños, y qué quieren para sus hijos, a lo que todos los presentes contestaron: ‘La fe’.
Así, el Papa destacó: “Vosotros habéis pedido la fe. La Iglesia, cuando os entregará la vela encendida, os dirá que custodiéis la fe de estos niños. Y al final, no os olvidéis que la mayor herencia que podréis dar a vuestros niños es la fe. Buscar que no se pierda, hacerla crecer y dejarla como herencia”. “Os deseo que seáis capaces de hacer crecer a estos niños en la fe, y que la mayor herencia que ellos reciban de vosotros sea justamente la fe”, insistió.
Por último, Francisco terminó sus palabras realizando un aviso. “Cuando un niño llora porque tiene hambre, a las mamás les digo: ‘Si tu niño tiene hambre, dale de comer aquí con toda libertad’”, afirmó sonriente.