(ZENIT – Roma).- El presidente de la Cáritas griega, el padre Antonio Voutsinos, señaló que la situación de inmigrantes que se encuentran atrapados en Grecia despierta fuerte preocupación, sobre todo después de las repatriaciones hacia Turquía que comenzaron el lunes 4, por decisión de la Unión Europea. Entretanto precisó que «los griegos dieron un gran ejemplo de la solidaridad evangélica”.
Por otro lado en Roma, el presidente de la Comunidad San Egidio señaló que los corredores humanitarios demuestran su eficacia y que junto a la Iglesia evangélica, traerán desde el Líbano a 150 refugiados sirios.
En declaraciones a la agencia SIR, el sacerdote griego Voutsinos añadió que actualmente se encuentran en el territorio de su país unos 50.000 refugiados repartidos en las islas del sur y en Atenas; y en el campo Idomeni cerca de la frontera con Macedonia hay otros 5.000 refugiados, además de los asentamientos informales.
Es claro que un posible viaje de Francisco a la isla griega de Lesbos, donde desembarcan los refugiados, «sería un gran gesto y un muy buen ejemplo para todos” aunque dijo no tiene otras informaciones que las manejadas por los medios públicos de información.
El lunes 4, fueron repatriados a Turquía más de doscientas personas desde la isla de Lesbos, en su mayoría paquistaníes y bangladesíes, pero los refugiados no quieren volver atrás y están tratando de ganar tiempo haciendo solicitudes de asilo político, explicó el presidente de Cáritas. «Y si inicialmente solo estaban de paso, ahora están obligados a permanecer aquí y todo va a ser más complicado», dijo. En consecuencia, «aumentan las necesidades primarias y la atención».
La Cáritas de Grecia, en colaboración con Cáritas europea ha implementado diversos programas de ayuda humanitaria en Lesbos, en las islas del sur, en Atenas y en Idomeni, y ayuda a miles de refugiados gracias al apoyo de muchos voluntarios. «Los griegos dieron un gran ejemplo de la solidaridad evangélica, a pesar de la crisis económica que estamos viviendo». En las islas griegas, añadió, «las llegadas continúan, aunque se haya producido un ligero descenso”.
De otro lado este martes en Roma, en la Asociación de Prensa Extranjera, el presidente de la Comunidad San Egidio, Marco Impagliazzo y el presidente de la Federación de las Iglesias evangélicas en Italia, Luca Maria Negro, anunciaron la llegada de 150 refugiados sirios desde el Líbano gracias al proyecto de los ‘corredores humanitarios’.
Llegarán al aeropuerto romano de Fiumicino en un vuelo de línea, sin arriesgar la vida en los barcos o botes que cruzan el Mediterráneo y tendrán los visados respectivas facilitados por Italia.
De un lado, “hoy es un día triste para Europa –dijo Impagliazzo– porque al repatriar migrantes rechaza sus principios de acogida y protección a las personas que huyen de los conflictos y la violencia”. Aunque de otro, añadió, el proyecto de los corredores humanitarios demuestra que en vez de muros se puede dar una respuesta positiva a quienes huyen de la guerra.
Cáritas en Croacia en el campo de prófugos de Slavonski Brod (Fto copiright cáritas)
Cáritas helénica: los griegos están dando ejemplo de solidaridad
La Comunidad San Egidio subraya en Roma que los ‘corredores humanitarios’ funcionan