(ZENIT – 11 marzo 2019).- El primer domingo de Cuaresma, a las 18 horas, empezaron los ejercicios espirituales de la Curia Romana, en los que participa el Papa Francisco, en la Casa Divino Maestro en Ariccia, hasta el próximo viernes, 15 de marzo de 2019.
Este año, las meditaciones correrán a cargo del abad Bernardo Francesco Maria Gianni de la Abadía de San Miniato al Monte, en Florencia desde 2015.
Padre Gianni, abad benedictino
El padre Gianni es de la Congregación Olivetana de la Orden de San Benito (olivetano). Nació en Prato, Italia, en 1968. Fue miembro del Comité preparatorio del Quinto Congreso Nacional de la Iglesia Italiana que se llevó a cabo en Florencia en 2015.
“Para mí –señala el benedictino – ha sido un privilegio increíble tener la posibilidad de intentar hacer una síntesis de mi vida pobre y hacerla evangélicamente legible y fructuosa para la utilidad de quien tiene la inmensa responsabilidad de acompañar a la Iglesia universal”, informó Vatican News en español.
Mirada en la ciudad
El tema principal sobre el que profundizarán estos días es «La ciudad de los ardientes deseos: Para miradas y gestos pascuales en la vida del mundo”.
Los temas de las meditaciones elegidas por el monje benedictino olivetano Bernardo Francesco Maria Gianni, se inspiran en la poesía del poeta italiano Mario Luzi de 1997. El religioso benedictino señaló a Vatican News que este tema «es un útil instrumento con el cual pensar y re-prensar la Iglesia y la sociedad civil en constante búsqueda de inclusión».
Es «fruto de oración y reflexión, un tema que corresponde a la vida monástica, una vida orientada hacia el Señor, pero con la ciudad perennemente presente en nuestra mirada», indica el religioso que predicará los ejercicios. “He pensado que puede ser útil la capacidad de releer monásticamente la tensión entre nuestro corazón enraizado en el Señor, en el misterio, en la liturgia, en la vida fraterna, en el trabajo, en la fuerte experiencia benedictina y esta mirada dirigida hacia la ciudad”.
Audiencias suspendidas
Durante esta semana quedan suspendidas todas las audiencias del Santo Padre, incluida la audiencia general del miércoles, 13 de marzo.
De lunes a jueves habrá dos meditaciones diarias. El viernes, 15 de marzo, los sacerdotes solo atenderán a la meditación de la mañana para en la tarde volver al Vaticano. Todos los días comenzarán con la celebración de la Misa y concluirán con las vísperas y Adoración Eucarística.
