Por: Enrique Villegas
Quien asiste a misa puede advertir que hay dos libros especiales: el que usa el sacerdote, que se llama Misal, y el que se usa para leer la Palabra de Dios, que se llama Leccionario.
Por cuanto informa The Tablet (“New Bible translation will use inclusive language”, 06.05.2021), la nueva traducción de la Biblia que usará la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales para una nueva edición del Leccionario usará un lenguaje inclusivo, según el contexto lo precise.
Este trabajo de “adaptación” ha llevado 18 meses y se realiza a partir de la versión estándar en inglés de la edición católica de la Biblia: se introducirán notas al pie de página para hacer notar que algunos usos de palabras como cuando en la Sagrada Escritura aparece “hermanos” (adelphoi) está referido tanto a hombres como a mujeres. “No podemos cambiar el idioma de la Biblia, pero podemos adaptarlo para que hable poderosamente a las personas de esta época», ha dicho el arzobispo de Cardiff, Mons. George Stack, presidente del Departamento de Vida y Adoración Cristiana de los Obispos Católicos de Inglaterra y Gales.
La nueva edición también prevé cambios en la ortografía, la puntuación o la “anglicanización” de palabras o frases, según corresponda. Por otra parte, el obispo también subrayó que el uso de “hijo”, cuando se refiere a la filialidad en Cristo, en la teología paulina, no se toca: “A menudo hay diferentes niveles de significado en una misma palabra. Por ejemplo, cuando Jesús está hablando con los Doce, no está hablando con todos los discípulos, hombres y mujeres, está hablando con el colegio apostólico como lo entendemos. De manera similar, hijo o hija significa una cosa en un contexto, pero en el nivel más profundo de todos – San Pablo en Gálatas o Romanos, por ejemplo – habla de ser hijos en el Hijo, y lo que Dios ve en Jesucristo su Hijo. Esa es una teología muy profunda, sobre ser un hijo en el Hijo, de adopción filial en Cristo Jesús, esa es una teología profundamente diferente y muy profunda».
Mons. Stack reconoce que el lenguaje inclusivo puede generar controversia, pero subraya que no se trata de algo superficial.