(ZENIT Noticias / Munich, 27.01.2022).- Este jueves 27 de enero el arzobispo de Munich-Frisinga, cardenal Reinhard Marx, dio una declaración de prensa en la que ofreció su postura oficial una semana después de haberse dado a conocer el informe sobre los abusos en la diócesis de la que también fue pastor unos años el actual Papa emérito.
“Había un lado oscuro [de la Iglesia] que ha salido a la luz en los últimos años. Este lado oscuro pertenece a una mirada honesta y realista de la Iglesia de hoy”, declaró el cardenal Marx, quien también calificó a la Iglesia como “lugar de miseria y miedo para muchos”.
El cardenal Marx también anunció que ahora las prioridades era un mayor compromiso con las víctimas: «Se trata de impulsar las reformas y el camino sinodal. Quiero hacer más de eso. Si no hay una renovación profunda, el trabajo no tendrá éxito», sentenció.
El arzobispo de Munich admitió su responsabilidad moral en la actual situación de la diócesis y manifestó que “Vuelvo a pedir disculpas, personalmente en nombre del Arzobispado, a los que han sufrido. Los que rechazan las causas sistémicas y una necesaria reforma de la Iglesia no han entendido el reto”. También declaró que “no se aferra al cargo” y por tanto que sigue poniendo en manos del Papa su nombramiento como obispo de la diócesis.
Además del cardenal Marx también han hecho declaraciones en la rueda de prensa de este jueves 27 de enero (recogidas en la web de la diócesis), el vicario general de la diócesis, Christoph Klingan, y Stephanie Herrmann, jefa de prensa.