El joven héroe de 14 años, Viacheslav Yalyshev. Foto: Metro.Co.Uk

Cartas desde la guerra (día 70): el joven de 14 años que salvo vidas a costa de la suya

“Hoy quiero contarles a todos un acontecimiento dramático pero heroico. Precisamente el 2 de mayo, nuestra ciudad de Odesa una vez más fue objeto de un ataque con misiles. Fue entonces cuando un niño de 14 años, Vyacheslav Yalyshev, supo tener una muerte heroica. Al sentir la sirena antiaérea, corrió para avisarle a sus vecinos, personas mayores para ayudarles a esconderse en el refugio antiaéreo. A ellos los salvó, pero él murió. Fue un acto heroico de un adolescente. Dando su vida salvando a sus ancianos vecinos de los misiles rusos en la Odesa ucraniana, Vyacheslav nos revela una página más del testimonio heroico que el pueblo ucraniano está dando hoy al mundo”, dice Su Beatitud Sviatoslav Shevchuk.

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(ZENIT Noticias / Kiev, 04.05.2022).-  70 días después de iniciada la guerra, el arzobispo mayor de los greco-católicos ucranianos sigue manteniendo al mundo cercano a los acontecimientos que se suceden en su país. En esta ocasión, además de seguir su catequesis sobre las bienaventuranzas, da cuenta del testimonio de un chico de 14 años que logró salvar vidas a costa de la suya. A continuación el texto en español.

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¡Cristo ha resucitado!

Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy es miércoles 4 de mayo de 2022 y Ucrania ya está soportando su 70º día de esta guerra brutal que Rusia decidió contra nuestra Patria y contra nuestro pueblo.

Ayer toda Ucrania fue atacada con grandes y fuertes misiles… Veinte misiles de crucero fueron disparados contra Ucrania en una sola noche. Fueron alcanzadas ocho regiones de nuestra Patria. Podemos decir que hubo tantos misiles en una sola noche en Ucrania como, por ejemplo, en Siria, en 11 años de guerra.

Podemos ver que se está desarrollando en nuestras tierras una confrontación militar de tal fuerza e intensidad que no se pueden comparar con nada desde el final de la Segunda Guerra Mundial.

Pero el pueblo ucraniano está dando ejemplos de un heroísmo sin precedentes defendiendo su Patria, defendiendo su tierra natal. Toda Donbás y el sur de Ucrania están bajo fuego. De nuevo, una vez más, bombardearon Kharkiv y bombardearon Mykolajiv. Gracias a Dios, se lograron salvar algunos cientos de personas de Mariúpol, de Azovstal y nuestros defensores mantienen allí valientemente sus posiciones sin poder siquiera evacuar a los heridos que lentamente van muriendo por sus heridas. El pueblo ucraniano sorprende al mundo. Por su heroísmo, por su celo, por su amor a Dios y a su Patria….

Hoy me gustaría meditar con ustedes sobre una bienaventuranza más. Una que está muy profundamente relacionada con todas las bienaventuranzas anteriores y con la misión de los cristianos. En particular con la misión de los cristianos en el mundo de hoy. Cristo dice a sus discípulos: “Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa”.

Vemos que es necesario que este don, el regalo de la Vida Eterna, el don de la vida de Cristo resucitado que recibimos en el Bautismo, lo mostremos a los demás. Es necesario testimoniarlo al mundo. Y cada vez que se nos persigue, se nos desprecia, se nos critica, se nos persigue… Este don empieza a brillar más para el mundo.

Cristo dijo a sus discípulos: “os echarán mano y os perseguirán, (…) llevándoos ante reyes y gobernadores por mi nombre; esto os sucederá para que deis testimonio”. El Señor dijo: “Proponed, pues, en vuestro corazón no preparar la defensa, porque yo os daré una elocuencia y una sabiduría a la que no podrán resistir ni contradecir todos vuestros adversarios”.

Sentimos que esto se ha hecho realidad y está ocurriendo en el destino de nuestro pueblo y de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana.

Ya hemos dicho que esta guerra, cada gran guerra, está relacionada con una gran mentira. Pero el Señor Dios nos revela al mundo como un gran tesoro que brilla con su verdad. Sobre todo, cuando sufrimos por la verdad. Cuando damos testimonio de Cristo con el sufrimiento de Ucrania.

Hoy quiero contarles a todos un acontecimiento dramático pero heroico. Precisamente el 2 de mayo, nuestra ciudad de Odesa una vez más fue objeto de un ataque con misiles. Fue entonces cuando un niño de 14 años, Vyacheslav Yalyshev, supo tener una muerte heroica. Al sentir la sirena antiaérea, corrió para avisarle a sus vecinos, personas mayores para ayudarles a esconderse en el refugio antiaéreo. A ellos los salvó, pero él murió. Fue un acto heroico de un adolescente. Dando su vida salvando a sus ancianos vecinos de los misiles rusos en la Odesa ucraniana, Vyacheslav nos revela una página más del testimonio heroico que el pueblo ucraniano está dando hoy al mundo.

Oh Dios, bendice a Ucrania. Oh Dios, danos fuerza para dar testimonio de Ti en este mundo de hoy. Oh Dios, que, a través de nuestro sufrimiento, dolores, a través de las humillaciones que el enemigo vierte sobre nosotros, danos la oportunidad de dar testimonio de Ti, de Nuestro Dios y Salvador. Oh Dios bendice a este pueblo heroico, a estos niños y adolescentes que dan su vida por amor al prójimo.

La bendición del Señor y su misericordia descienda sobre ustedes por su divina gracia y amor y permanezcan ahora y siempre y por los siglos de los siglos, amén.

¡Cristo ha resucitado! ¡Verdaderamente ha resucitado!

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Redacción Zenit

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