Por: Elizabeth Owen
(ZENIT Noticias / Jerusalén, 17.05.2022).- El pasado 11 de abril el ejército israelí asesinó de un disparo en la cabeza a la periodista cristiano-palestina Shireen Abú Akleh, quien tenía 51 años y se desempeñaba como corresponsal para Palestina de la cadena de televisión Al Jazeera. La difunta también era profesora en una universidad en y vivía en Jerusalén. El día de su asesinato estaba claramente identificada como prensa por un chaleco que lo reflejaba. Aunque en un primero momento el ejército israelí culpó a los palestinos, posteriormente manifestó que haría una investigación.
Días más tarde, en el contexto del funeral de la periodista, la policía israelí se fue violentamente contra las personas que cargaban el féretro y otros dolientes aduciendo que les estaban hostigando. En este contexto, el Patriarca Latino de Jerusalén, emitió un comunicado en el que expresó “su conmoción por la muerte de la reportera palestina Shereen Abu Aqleh que, según testigos presenciales, fue asesinada durante los enfrentamientos entre milicianos palestinos y el ejército israelí en el campo de refugiados de Yenín, en Cisjordania, en la mañana del miércoles 11 de mayo de 2022”.
El máximo representante de la Iglesia católica en Jerusalén pidió “una investigación exhaustiva y urgente de todas las circunstancias de su asesinato y que se lleve a los responsables ante la justicia”. Y añadió: “Esta flagrante tragedia devuelve a la conciencia humana la necesidad de encontrar una solución justa al conflicto palestino, que se niega a entrar en el olvido a pesar de haber transcurrido 74 años desde la Nakba”.
El Patriarca latino aseguró que rezaba “por el descanso del alma de Shereen, que fue un ejemplo de deber y una voz fuerte para su pueblo, y pedimos a Dios que conceda a su hermano y a sus familiares el consuelo de la fe. Rezamos para que el pueblo palestino encuentre su camino hacia la libertad y la paz”. También dijo que rezaba “por la recuperación del periodista Ali Samouri, que también resultó herido en el ejercicio de su profesión, y por todos los periodistas del mundo que desempeñan con valor su trabajo”.