La fe de la comunidad cristiana en Mocímboa da Praia, de mayoría musulmana, sigue siendo fuerte a pesar de que no quedan sacerdotes ni religiosos en la ciudad

La fe de la comunidad cristiana en Mocímboa da Praia, de mayoría musulmana, sigue siendo fuerte a pesar de que no quedan sacerdotes ni religiosos en la ciudad Foto: Ayuda a la Iglesia Necesitada

Musulmanes destruyeron su iglesia, pero católicos siguen yendo a ella los domingos

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La fe de la comunidad cristiana en Mocímboa da Praia, de mayoría musulmana, sigue siendo fuerte a pesar de que no quedan sacerdotes ni religiosos en la ciudad

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(ZENIT Noticias / Mocímboa da Praia, Mozambique, 02.07.2024).- Cuatro años después de que los extremistas islamistas destruyeran su iglesia, los católicos de una parroquia del noreste de Mozambique todavía se reúnen alrededor de las ruinas todos los domingos para orar y “dar gracias a Dios”.

La fe de la comunidad cristiana en Mocímboa da Praia, de mayoría musulmana, sigue siendo fuerte a pesar de que no quedan sacerdotes ni religiosos en la ciudad, dijo el catequista Vicente Gabriel de la diócesis de Pemba a la organización benéfica católica Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN).

Desde octubre de 2017 se han producido en la provincia de Cabo Delgado enfrentamientos violentos entre insurgentes yihadistas que buscan establecer un Estado islámico de línea dura y las Fuerzas Armadas de Defensa de Mozambique, que han matado a miles de personas y han desplazado a más de un millón de personas.

Gabriel dijo que los residentes huyeron cuando los terroristas ocuparon la ciudad en 2020, pero que muchos de ellos han regresado desde entonces: “Ahora estamos aquí, pero no tenemos nada… La iglesia fue destruida, al igual que la casa parroquial”.

Continuó diciendo que los cristianos se reúnen donde solía estar la Iglesia de la Inmaculada Concepción para orar juntos “todos los domingos, bajo los árboles de mango… Las condiciones son terribles, pero no nos rendimos. Seguimos practicando nuestra fe y damos gracias a Dios”.

Y añadió: “Nos sentamos aquí a la sombra de los árboles, pero ni siquiera tenemos sillas. Sin embargo, seguimos orando a Dios… Si todo va bien, Dios nos dará la manera de adquirir sillas”.

Teresa Mariano, miembro del coro parroquial, dijo a AIN: “Nos reunimos el domingo temprano en la mañana y le pedimos a Dios que envíe sobre nosotros el Espíritu Santo, que nos dé fuerzas para seguir adelante, para que nuestra parroquia no quede completamente abandonada».

El señor Gabriel dijo: “Nuestro mensaje desde Mocímboa da Praia al mundo es que ustedes continúen orando por nosotros. Debemos tener fe. Un día la parroquia de la Inmaculada Concepción podría volver a ser lo que era, tenemos esa esperanza”.

El catequista concluyó: “Dios lo es todo. Tenemos coraje, no podemos abandonar a Dios por estos acontecimientos: todos estos son signos de vida”.

En declaraciones a ACN, el obispo António Juliasse Ferreira Sandramo, de Pemba, afirmó que visitó Mocímboa da Praia en julio de 2023 y quedó conmovido por la devoción y la alegría que presenció: “Celebramos misa bajo los árboles de mango, bajo la lluvia y el frío, pero la gente permaneció dos horas cantando y bailando”.

ACN está en contacto con el obispo Sandramo sobre una posible ayuda para la reconstrucción de iglesias y otros edificios parroquiales destruidos por los extremistas.

El apoyo de la organización benéfica a Mozambique ha incluido ayuda de emergencia, asistencia pastoral y asesoramiento para desplazados internos (personas desplazadas internamente), así como apoyo a la formación de seminaristas y ayuda de subsistencia para sacerdotes y religiosos.

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Amy Balog

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