Jolly es un judío que se ocupó de dirigir “artísticamente” la ceremonia inaugural.

Thomas Jolly es un judío que se ocupó de dirigir “artísticamente” la ceremonia inaugural. Foto: RRSS

La persona detrás de la ceremonia inaugural de las olimpiadas de París y el problema de la inclusión forzada

El problema de la inclusión es que cuando es forzada, metida con calzador y mantenida con corsé, termina por convertirse en grotesca y odiosa.

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(ZENIT Noticias / Roma, 28.07.2024).- Tras la mediocre representación de la Última Cena con un espectáculo no menos mediocre en el contexto de la inauguración de las olimpiadas 2024, los obispos franceses publicaron un comunicado en el que decían: “pensamos en todos los cristianos de todos los continentes que se han sentido heridos por el ultraje y la provocación de ciertas escenas. Queremos que comprendan que la celebración olímpica va mucho más allá de los prejuicios ideológicos de unos pocos artistas”. Pero, ¿a qué “artistas” se refieren?

En una publicación en X, al final de la ceremonia de inauguración de las olimpiadas de París, el presidente Macron escribía una peculiar felicitación: “Gracias a Thomas Jolly y su genio creativo por esta grandiosa ceremonia. Gracias a los artistas por este momento único y mágico”.

¿Quién es Thomas Jolly y qué tenía que ver con el insulto contra millones de cristianos en el contexto de un torneo olímpico? Jolly es un judío que se ocupó de dirigir “artísticamente” la ceremonia inaugural. Él mismo es homosexual y es ampliamente conocido por meter el tema ideológico del género en su trabajo. De hecho, en una intervención en la tv reconoció que el tema central de su trabajo en las olimpiadas no era el deporte sino la inclusión.

El problema de la inclusión es que cuando es forzada, metida con calzador y mantenida con corsé, termina por convertirse en grotesca y odiosa.

Millones de personas, incluso no cristianas, o ni siquiera creyentes, han sido capaces de captar que algo ya no va bien cuando en nombre de la inclusión se insulta a otros o se deja fuera a quien no va con tu narrativa ideológica. El líder de la ultra izquierda francesa, Jean-Luc Mélenchon, ha llegado a decir: “No me gustó la burla de la Última Cena cristiana, la última comida de Cristo y sus discípulos, fundador del culto dominical. Por supuesto, no entro en la crítica de la “blasfemia”. Esto no concierne a todos. Pero pregunto: ¿por qué arriesgarse a herir a los creyentes? ¡Incluso cuando seamos anticlericales! Esa noche estábamos hablando con el mundo. Entre los mil millones de cristianos que hay en el mundo, ¿cuántas personas valientes y honestas a quienes la fe les ayuda a vivir y saben participar en la vida de todos, sin molestar a nadie?”.

Pero lo de la Última Cena fue sólo un detalle. ¿Qué decir del trío sexual sugerido en una parte de las escenas? ¿No parece extraño que santa Juan de Arco no apareció entre las estatuas de mujeres, la mayoría de ellas abortistas, ensalzadas durante la ceremonia?

Ahora sugieren que no se trataba de la Última Cena… pero al parecer les faltó ponerse de acuerdo o decirles a todos que digan lo mismo, pues la DJ del burdo sketch queer de la inauguración olímpica posteo en sus redes una historia que dice lo contrario como también lo refieren declaraciones a Le Parisien.

En 1992, las olimpiadas de Barcelona tuvieron a dos grandes artistas en el mismo escenario: Montserrat Caballé y Freddie Mercury. Era evidente el sobrepeso de la primera y la condición de homosexual del segundo. Pero ambos estaban allí por sus cualidades, no por su condición. En la inauguración de las olimpiadas de París se echó de menos a personas con cualidades, incluso con un poco, solo un poco de talento. Tan es así que muchos de los que pagaron entre 900 y 3,000 euros para ver la ceremonia de inauguración de las olimpiadas de París se sintieron defraudados por el mediocre espectáculo ofrecido en el que, de no ser por Celine Dion, Rafael Nadal y tres personas más, poco hubiera valido la pena.

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Jorge Enrique Mújica

Licenciado en filosofía por el Ateneo Pontificio Regina Apostolorum, de Roma, y “veterano” colaborador de medios impresos y digitales sobre argumentos religiosos y de comunicación. En la cuenta de Twitter: https://twitter.com/web_pastor, habla de Dios e internet y Church and media: evangelidigitalización."

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