(ZENIT Noticias / Lisboa, 13.12.2025).- La Compañía de Jesús en Portugal inició en 2024 un proceso de escucha a los jóvenes, cuyas conclusiones se presentan en el informe « Escuchar para acompañar: una mirada pastoral a la generación de jóvenes adultos». Este informe busca contribuir a una mejor comprensión de las aspiraciones, los desafíos y las esperanzas de los jóvenes de entre 25 y 35 años, muchos de los cuales son antiguos alumnos de colegios jesuitas o han participado en centros universitarios y campamentos jesuitas.
Las conclusiones señalan la necesidad de una pastoral que escuche, acoja y acompañe con autenticidad, ofreciendo propuestas relevantes e inclusivas adaptadas a los ritmos y desafíos de la vida cotidiana. «Existe un deseo inequívoco en esta generación de vivir una fe madura, encarnada y comprometida. La Iglesia está llamada a acompañarla con escucha, libertad y creatividad», concluye el informe.
El proyecto nació de la intuición del Equipo de Pastoral Juvenil y Vocacional (PAJUV), entonces integrado por los sacerdotes jesuitas Duarte Rosado, Miguel Pedro Melo y Samuel Beirão, y el matrimonio Isabel y João Sousa Guedes, de que una parte significativa de esta generación experimentaba cierta desconexión con las propuestas pastorales disponibles. La necesidad de escuchar se convirtió así en el punto de partida de un camino sinodal y participativo.
“Creemos que muchos jóvenes adultos desean integrar la fe en su vida diaria, pero no encuentran espacios donde puedan experimentarla con naturalidad. Este estudio tuvo como objetivo escucharlos para brindarles un mejor apoyo”, explica Isabel Sousa Guedes, jefa del equipo que realizó el estudio.
Un proceso de escucha nacional
La investigación contó con 95 participantes (de un total de 162 registrados), mediante 24 entrevistas grupales en línea y cuestionarios, que reunieron a jóvenes de Lisboa, Oporto, Coímbra, Braga y otras ciudades, así como a portugueses residentes en el extranjero. Los encuestados son, en su mayoría, jóvenes trabajadores que, tras haber tenido una relación con la Compañía de Jesús y la Iglesia en su juventud, ahora enfrentan dificultades para continuar esa experiencia.
La muestra se organizó en cinco personajes representativos de diferentes situaciones de vida (solteros, parejas, con o sin hijos, practicantes o no practicantes), lo que permitió capturar en profundidad la diversidad de esta generación.
Hallazgos clave
El estudio revela una generación feliz, comprometida y relacional que valora profundamente la comunidad y las relaciones interpersonales —familia, amistad y fe—, pero siente una falta de espacios de pertenencia adecuados a su etapa vital. Entre las principales dificultades que experimentan se encuentran la falta de tiempo, el cansancio y la inadecuación de algunas propuestas pastorales a la realidad de los jóvenes trabajadores y las familias jóvenes.
Los participantes expresaron el deseo de:
- Integrar la fe y la vida cotidiana, uniendo espiritualidad, profesión y familia;
- Tener acceso y orientación espiritual personalizada;
- Ofreciendo formatos flexibles e innovadores, incluyendo actividades en línea, podcasts y reuniones breves;
- Encontrar espacios comunitarios y opciones para familias (misas adaptadas, cuidado de niños , retiros cortos);
- Y mantener una conexión con la fe y la comunidad incluso en el contexto de la emigración.
Una contribución a la pastoral juvenil y vocacional
El equipo espera que el estudio sirva como base para nuevas experiencias pastorales dentro del universo ignaciano —centros universitarios, colegios, parroquias y proyectos como Brotéria— e inspire a otros agentes pastorales a renovar sus formas de presencia entre los jóvenes adultos.
El informe completo «Escuchar para acompañar» está disponible aquí.
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