CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 5 abril 2004 (ZENIT.org).- Juan Pablo II ha invitado a los universitarios a discernir las «insidias» que en ocasiones propone la publicidad y a utilizar las posibilidades que ofrece este lenguaje para comunicar mensajes positivos.
Es la consigna que dejó este lunes a los tres mil jóvenes participantes en el congreso internacional «UNIV 2004» con los que se encontró en la Sala Pablo VI del Vaticano.
Comentando el argumento que congrega a los universitarios, «Proyectar la cultura: el lenguaje de la publicidad», el Papa aseguró que «es necesario saber usar lenguajes adecuados para transmitir mensajes positivos, y para dar a conocer de modo atractivo ideales e iniciativas nobles».
Al mismo tiempo, añadió, «es imprescindible discernir cuáles son los límites y las insidias de los lenguajes que nos proponen los medios de comunicación social».
«A veces, los anuncios publicitarios ofrecen una visión superficial e inadecuada de la vida, de la persona, de la familia y de la moralidad», constató en su discurso pronunciado en italiano.
En esta labor de promoción de valores elevados y de discernimiento, el obispo de Roma, consideró que los cristianos deben «seguir a Jesús de cerca, con la ayuda de la oración y la contemplación».
«Además, ser sus amigos en el mundo en el que vivimos exige el esfuerzo de ir contracorriente», añadió repitiendo una expresión que había utilizado durante la homilía del Domingo de Ramos, Jornada Mundial de la Juventud en este año.
«¡Que en la universidad, en la escuela y en los lugares en que os encontréis no tengáis miedo de ser anticonformistas cuando sea necesario!», pidió el Papa a los chicos y chicas que le escuchaban.
El Papa les invitó «de modo especial» a difundir la visión cristiana de la virtud de la pureza, sabiendo mostrar a vuestros coetáneos, como decía san Josemaría Escrivá de Balaguer, que ésta «nace del amor» y que, «para el amor limpio, no son obstáculos la robustez y la alegría de la juventud».
«¡Que nunca se apague el deseo de ver a Cristo en lo más profundo de vuestro corazón! –deseó Juan Pablo II–. Sabed superar las emociones superficiales, resistiendo a las seducciones de los placeres y a las ambiciones del egoísmo y de la comodidad».
«Para mejorar el mundo –les recomendó antes de concluir–, esforzaos sobre todo por cambiar vosotros mismos mediante el recurso al sacramento de la Penitencia y la identificación íntima con Cristo en la Eucaristía».
El congreso universitario UNIV se celebra anualmente en Roma desde 1968 en Semana Santa con la asistencia del Opus Dei. Está organizado por el Instituto para la Cooperación Universitaria (ICU), una ONG italiana que promueve iniciativas de cooperación al desarrollo en muchos países del mundo.
En las palabras que dirigió al Papa el presidente del congreso universitario, el estadounidense Justin Gillespie, explicó que en este congreso los jóvenes están estudiando un aspecto central de la cultura: «la comunicación y, en particular, el lenguaje de los anuncios publicitarios».
«Al invitarnos a encontrarnos en Colonia en la próxima Jornada Mundial, usted nos ha confiado la Cruz de Cristo, diciéndonos: «Llevadla al mundo como signo del amor del Señor Jesús por la humanidad y anunciad a todos que no hay salvación y redención si no es por Cristo, muerto y resucitado»», recordó Gillespie.
«Para realizarlo, sabemos que encontraremos dificultades. Sin embargo, sabemos también que podemos contar con la oración del Santo Padre por cada uno de nosotros», concluyó.