CIUDAD DEL VATICANO, domingo, 19 diciembre 2004 (ZENIT.org).- Juan Pablo II invitó a los gobernantes de la nueva Europa a educar a los jóvenes en profundos valores morales y cívicos al recibir este sábado en audiencia al primer ministro de Hungría, Ferenc Gyurcsány.
«Con la entrada de Hungría en la Unión Europea este año, un nuevo y significativo capítulo se ha abierto ahora en su historia», comenzó constatando el Papa en el discurso que dirigió en húngaro a su huésped.
«Confío en que su país ofrezca una contribución específica al futuro de este continente recurriendo al rico patrimonio de valores culturales y espirituales que, desde el tiempo de San Esteban [el rey de Hungría fallecido en 1038 que convirtió al cristianismo a su reino] han formado el alma del pueblo húngaro».
«En este sentido, pienso especialmente en los jóvenes de su nación, y en la importancia de educarles en profundas virtudes cívicas y morales», indicó.
«Es un campo de particular preocupación para la Iglesia, que busca ofrecer su contribución al bien común en el cumplimiento de su misión religiosa y educativa», aseguró.
En este contexto, el obispo de Roma reconoció su apreció «por la serie de acuerdos jurídicos entablados entre Hungría y la Santa Sede en los últimos años, en particular el «Acuerdo sobre la financiación de servicios públicos y otras actividades religiosas emprendidas en Hungría por la Iglesia católica»».
«Este «Acuerdo» define de manera jurídica el papel de la Iglesia en un terreno importante de la sociedad húngara, con el debido respeto del derecho a la libertad religiosa y a la educación», reconoció.
«Espero que este espíritu de cooperación constructiva siga caracterizando el trabajo tanto de la Iglesia como del Estado en la tarea de aplicar fielmente lo que se negoció y acordó», deseó Juan Pablo II.
El parlamento de Hungría confirmó el 29 de septiembre a Ferenc Gyurcsány, de 43 años, como primer ministro con el apoyo del Partido Socialista (MSZP) y la coalición de Demócratas Libres (SZDSZ).
El 67.5% de los diez millones de habitantes de Hungría es católico. Es importante la presencia de calvinistas (20%), y luteranos (5%).