MÉXICO, martes 15 de diciembre de 2009 (ZENIT.org–El Observador).- A través del vocero oficial de la Arquidiócesis Primada de México, el padre Hugo Valdelamar Romero, este domingo, en conferencia de prensa, la Iglesia católica mostró su franca oposición a la legalización de los «matrimonios» entre homosexuales puesto que va en contra del concepto natural de familia y contradice los sacramentos.
Con estas palabras, se abrió otro frente de batalla en la Ciudad de México, gobernada por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), un partido de izquierda que ya legalizó el aborto hasta las 12 semanas de gestación y ahora pretende legalizar las uniones de homosexuales, así como el acceso a la eutanasia, entre otras leyes que el jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard Cazaubón, estaría encabezando junto con la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), dominada por el PRD.
El padre Hugo Valdelamar Romero subrayó que la doctrina de la Iglesia considera que solamente haya matrimonio entre hombre y mujer. «La Iglesia no condena a las personas, sino los actos homosexuales y la propuesta de matrimonio entre personas del mismo sexo», dijo ante una numerosa representación de periodistas.
Valdemar Romero sostuvo que, de aprobarse esa ley en la ALDF, lo cual es un hecho pues el Código Civil y de Procedimientos Civiles del Distrito Federal ya fue modificado en el reconocimiento del matrimonio de personas del mismo sexo, aunque no incluye la adopción, la Iglesia católica no excomulgará a los homosexuales, aunque para la Iglesia, reiteró es algo «inmoral, inadecuado y contradice el sacramento del matrimonio».
«Hay de pecados a pecados, de gravedad a gravedad, en este caso, por ejemplo, no amerita una excomunión; sin embargo, la Iglesia considera que esta unión no es ética, es inmoral», aclaró el vocero de la Arquidiócesis Primada de México, cuyo pastor es el cardenal Norberto Rivera Carrera.