secretario de Estado, cardenal Tarcisio Bertone, el Papa condena este “grave acto de violencia”, y desea “hacer llegar sentimientos de cercanía espiritual y de vivas condolencias a los familiares de las víctimas”.
El Papa asegura “fervientes oraciones de sufragio por las vidas truncadas y, mientras invoca del Señor el consuelo celeste a cuantos lloran su trágica partida, envía su saludo bendiciente, unido a un pensamiento particular a cuantos permanecen heridos”.
El propio cardenal Bertone, al final del telegrama, se une también “al dolor de la Federación Rusa”.
El atentado tuvo lugar ayer, en la terminal internacional del aeropuerto moscovita de Domodédovo, provocado por una mujer terrorista que llevaba una mochila cargada de explosivos. Por el momento hay 35 muertos y 130 heridos, según el Ministerio de Sanidad ruso.