Las páginas del diario italiano «Avvenire» recogieron el sábado esta novedad, prevista en la plataforma programática del futuro gobierno holandés.
La innovación procede de la pequeña formación (protestante) Unión Cristiana, aliada de cristiano-demócratas y laboristas.
Jan Peter Balkenende anunció que estará al frente del gobierno holandés, por tercer mandato, esta vez formado por miembros de su partido, los cristiano-demócratas (CDA), y también por los laboristas (PdvA) y la Unión Cristiana (Cu).
Éste último partido cuanta con seis diputados entre los 150 elegidos el pasado 22 de noviembre.
Como «partido bisagra», ha obtenido algunos compromisos vinculantes de la nueva coalición, tales como la lucha contra la prostitución ilegal, «no» a los bares cerca de las escuelas, iniciativas para ofrecer alternativas al aborto y a la eutanasia y, finalmente, la sustitución de aquellos oficiales de Estado que, por conciencia, no quieran «casar» a parejas homosexuales.
Desde la entrada en vigor de la ley –el 1 de abril de 2001- que permite tales uniones con tal consideración, se calcula que Holanda ha registrado más de ocho mil «matrimonios homosexuales».