Se trata del pequeño volumen preparado originariamente por el padre Roberto Coggi O.P. para el «Instituto San Clemente I Papa Mártir» (www.istitutosanclemente.it) de Roma y publicado en Italia en 2001 por Edizioni Studio Domenicano (ESD).
El «Pequeño Catecismo Eucarístico» ya se ha publicado en varios países en italiano, francés, español, inglés, portugués, rumano, polaco y swahili; ya están preparadas además las ediciones en alemán, chino y japonés.
«Tras haber concluido el Año de la Eucaristía, la CBCI, y en particular la Comisión para la Biblia y la Catequesis, decidió publicar el “Pequeño Catecismo Eucarístico” como continuación del gran evento proclamado por el Pontífice Juan Pablo II», explicó el presidente de la citada Comisión episcopal, el obispo Devadass Ambrose Mariadoss –de Tanjore—, a Zenit.
El libro «está dedicado en especial a los niños, si bien se pueden beneficiar de él también jóvenes y adultos», precisó.
Y es que «la atención de los niños es muy importante en las actividades de la parroquia –reconoció–, en particular en lo relativo a la difusión de la práctica eucarística».
El prelado subrayó la importancia de la frecuencia del Sacramento y puntualizó: «Todos los creyentes deben recibir la preparación necesaria para aprender los elementos fundamentales de la fe cristiana, y el sacramento de la Eucaristía es el centro».
En cuanto a la atención pastoral de los niños, monseñor Mariadoss recordó que «Jesús nos dijo que para entrar en el reino de los Cielos hay que tener el corazón de un niño, mientras que el Pontífice Juan Pablo II subrayó su importancia en la Iglesia».
Así ocurría hace poco más de un año: el día de la Epifanía, Juan Pablo II afirmaba: «Los niños son el presente y el futuro de la Iglesia. Tienen un papel activo en la evangelización del mundo, y con sus oraciones contribuyen a salvarlo y mejorarlo» (Zenit, 6 enero 2005).
El Papa San Pío X dedicó gran empeño por acercar a los niños a la Eucaristía, y en su Decreto «Quam Singulari» del 8 de agosto de 1910 estableció que los pequeños podrían recibir la primera Comunión a la edad de siete años.
Ello tiene eco en el Código de Derecho Canónico –recuerda el prelado indio–. El canon 914 señala que «los padres en primer lugar, y quienes hacen sus veces, así como también el párroco, tienen obligación de procurar que los niños que han llegado al uso de razón se preparen convenientemente y se nutran cuanto antes, previa confesión sacramental, con este alimento divino».
«De este punto de vista, el “Pequeño Catecismo Eucarístico” es un instrumento extraordinario para preparar a los niños a la Eucaristía; espero que sea bien acogido en las parroquias, en las escuelas y en las casas de formación», expresó monseñor Mariadoss a Zenit.
La Comisión episcopal para la Biblia y la Catequesis que preside el prelado ha publicado el libro con las adaptaciones gráficas necesarias para hacerlo más acorde a la cultura y contexto indio.
Tres partes componen este especial catecismo: la primera se titula «El don de la Eucaristía» y explica el misterio eucarístico; las otras dos están, dedicadas a los santos y a los milagros eucarísticos, muestran cómo la devoción al Santísimo Sacramento está estrechamente unida a la santificación de la vida personal.
«La parte de los milagros eucarísticos es particularmente interesante y edificadora para los niños porque constituye una introducción al misterio de la fe», concluyó el prelado.
