CIUDAD DEL VATICANO, miércoles 21 de enero de 2009 (ZENIT.org).- El Papa Benedicto XVI ha hecho llegar al Patriarca de Alejandría de los Coptos Antonios Naguib, su pesar por el fallecimiento del emérito de esta misma sede, el cardenal Stéphanos II Ghattas, que murió ayer en El Cairo.
El Papa quiso expresar su «unión en la oración» con esta Iglesia patriarcal, así como sus condolencias a la familia del fallecido, a los sacerdotes y fieles del Patriarcado y a los religiosos lazaristas a los que pertenecía el difunto.
El patriarca Ghattas fue, afirma, «un servidor fiel de la Iglesia en su labor como misionero en la Congregación de la Misión, después como obispo de Luxor y finalmente como Patriarca, que llevó a cabo con celo y sencillez al servicio del Pueblo de Dios, en un espíritu de diálogo y de convivencia con todos».
El Patriarcado católico copto de Alejandría es la cabeza de la Iglesia católica copta, una de las Iglesias orientales que está bajo la autoridad del Papa de Roma, aunque mantiene su rito y su organización propia.
El cardenal egipcio había nacido en Cheick Zein-el-Dine, eparquía de Sohag, en Egipto. Entró en el seminario menor de El Cairo en agosto de 1929 y concluyó los estudios clásicos en el coolegio de la Santa Familia de los Jesuitas en 1938. Fue enviado al Colegio «De Propaganda Fide» de Roma, donde se licenció en Filosofía y Teología.
Ordenado sacerdote en Roma en 1944, volvió a Egipto como profesor del seminario mayor de Tahta. En 1952 entró en la Congregación de la Misión de san Vicente de Paúl (Lazaristas), realizando el noviciado en París.
El 8 de mayo de 1967 el Sínodo copto-católico lo eligió obispo de Luxor de los Coptos, y en 1984 fue nombrado Administrador apostólico del Patriarcado de Alejandría, para sustituir a Su Beatitud Stéphanos I Sidarous, a quien sustituyó definitivamente en 1986.
Durante la visita de Juan Pablo II al Monte Sinaí en febrero del año 2000, acogió al Papa y le acompañço durante toda la peregrinación. El mismo año, el Patriarca condujo una peregrinación del Patriarcado a Roma, donde celebró una divina liturgia de rito copto-alejandrino en la Basílica de Santa María la Mayor.
Fue presidente del Sínodo de la Iglesia copto-católica y de la asamblea de la jerarquía católica de Egipto. Juan Pablo II lo creó cardenal el 21 de febrero de 2001.
