Cruz, de origen hispano, según su abogado, tenía un coeficiente intelectual inferior a 70, por lo que forma parte de la categoría de las personas con retraso mental. Los órganos legislativos de Texas están discutiendo una ley para impedir este tipo de ejecuciones, y el texto debería ser adoptado en los próximos ocho meses. De este modo, por una cuestión de meses, Cruz podría ser el último en morir en sus condiciones.
Las dos ejecuciones de Texas en un sólo día no constituyen un récord. Illinois y Arkansas ya han ajusticiado a dos condenados en un mismo día.