El nuevo abad del monasterio, el padre Ange Marie Niouku, ha declarado que no teme por el futuro de la vida monástica en Senegal, país de mayoría islámica: «Por gracia del Espíritu, se ha ganado aquí su propio espacio. Un amigo musulmán me ha dicho: «Vosotros sois débiles, pero sois fuertes, porque nosotros sentimos que estáis animados por una fuerza divina invisible»».
El monasterio de Keur Moussa está compuesto por monjes franceses y senegaleses. Fue fundado en 1963 y hasta 1984 dependía de la Abadía de Solesmes (Francia).