En la carta, firmada también por el secretario de la Conferencia, Juan José Asenjo, ambos se muestran «profundamente conmovidos» por el asesinato de Indiano a manos de la organización terrorista ETA, por lo que quieren hacer llegar su «condolencia sincera» a su familia y sus compañeros en las tareas municipales.
«Una vez más –precisa la misiva– condenamos la terrible escalada de terror de las últimas semanas y pedimos a quienes tan cruelmente asesinan a sus hermanos que cesen en esta espiral de muerte que tanto les degrada y tanto está haciendo sufrir a nuestro pueblo».
Monseñor Uriarte afirmó ayer que «la base misma de la vida democrática ha quedado socavada por la muerte violenta de un representante de la voluntad popular». En un comunicado destaca que la vida «todavía joven de Manuel Indiano ha sido inhumanamente segada por ETA», por lo que «sus familiares y seres queridos han quedado destrozados por este zarpazo terrible» y el «clamor de toda una sociedad».