El arzobispo de Ciudad de México se refería a la iniciativa de exponentes del Partido de la Revolución Democrática (PRD), mayoritario es esta ciudad, considerada como la más grande del mundo, de legalizar la «unión solidaria» entre personas del mismo sexo.
La iniciativa, sin embargo, dado que carecía de todo apoyo popular y político (se opusieron el Partido de Acción Nacional y el Partido Revolucionario Institucional), fue retirada ayer por sus mismos promotores.
La propuesta «es un ataque y degradación a la institución familiar, reconocida por las leyes civiles y la Constitución mexicana», advirtió el purpurado mexicano.