CIUDAD DEL VATICANO, 18 junio 2001 (ZENIT.org).- Rusia, Turkmenistán, Laos, India, Benín, Congo… han comenzado ya la preparación de las Jornadas Mundiales de la Juventud (JMJ) que se celebrarán en Toronto (Canadá) del 23 al 28 de julio.
Delegados de los obispos de estos países estuvieron presentes este fin de semana pasado en Roma para participar en la primera reunión internacional de preparación de este acontecimiento para el que ya se han recibido 400 mil reservaciones y que podría reunir a un millón de chicos y chicas en torno a Juan Pablo II.
El encuentro, convocado por el Consejo Pontificio para los Laicos y por el por el Comité Canadiense para la JMJ 2002, reunió al final a 60 delegados de diferentes países de todos los continentes y representantes de 40 movimientos y asociaciones internacionales juveniles.
El arzobispo Stanislaw Rylko, secretario del Consejo Pontificio para los Laicos, en declaraciones concedidas este lunes a «Radio Vaticano», ha destacado el impresionante esfuerzo que la Iglesia de Canadá está realizando para dar una espléndida acogida a los jóvenes. En estos momentos, ya ha empezado a movilizar a las escuelas, parroquias y familias para que ofrezcan su acogida a los muchachos.
El gobierno canadiense también está demostrando gran interés y colaboración. Por ejemplo, ya se ha comprometido a no cobrar a los jóvenes de más de 50 países en vías de desarrollo el impuesto que normalmente se exige para otorgar un visado.
El arzobispo Rylko considera que las Jornadas de Toronto serán particulares por dos motivos específicos: el tema y la ciudad que las acoge.
Por lo que se refiere al argumento, el Papa ha presentado el lema «Vosotros sois la sal de la tierra…, vosotros sois la luz del mundo». «Toca dos puntos centrales de la vida de los cristianos hoy –explica monseñor Rylko–: una identidad clara, transparente; así como una presencia incisiva en la sociedad».
En segundo lugar, concluye el arzobispo, la Jornada quedará también caracterizada por Toronto. «Se trata de nuevo de una gran metrópolis moderna, por tanto, plantea el testimonio cristiano que deben ofrecer los jóvenes en este nuevo areópago moderno de la ciudad, de la cultura moderna».
La página web oficial de las Jornadas Mundiales de la Juventud 2002 puede visitarse en http://www.wyd2002.org.