MAPUTO, 29 junio 2001 (ZENIT.org).- La Comunidad de San Egidio ha lanzado un plan en la lucha contra el sida en Mozambique que implica una profunda reorganización del sistema sanitario del país africano.
Lanzado en diciembre 2000, con una inversión de más de un millón de dólares, en el proyecto se han implicado varios médicos venidos de Europa, miembros de esta Comunidad, movimiento católico que surgió en Roma en 1968, fundado por el profesor Andrea Riccardi.
Leonardo Palombi, profesor asociado de Epidemiología de la Universidad de Tor Vergata (Roma), cooperador en el proyecto, afirma: «El sida está literalmente segando a las generaciones jóvenes africanas, las fuerzas nuevas del continente. En la zona subsahariana, hay 15 millones de personas enfermas. En Mozambique, tenemos 1,25 millones en una población de 18 millones. En estos años, nos ha llegado una llamada de la sociedad civil: haced algo».
Para contener los costes, en primer lugar el proyecto usa medicinas con los mismos principios activos de los fármacos más conocidos utilizados para combatir el sida, siguiendo la experiencia ya realizada a gran escala en Brasil e India.
En segundo lugar, el proyecto ha financiado la reestructuración los tres principales laboratorios farmacéuticos del país, en las ciudades de Maputo (sur), Beira (centro) y Nampula (norte), con el objetivo de ofrecer en particular análisis de sangre confiables.
Se prevé, además, un proceso de formación del personal sanitario y la modernización de la maquinaria en los hospitales. A esto se añadirán mejoras en los departamentos de maternidad, con la introducción de una adecuada profilaxis para los recién nacidos. En la actualidad, nacen casi 25.000 niños seropositivos en Mozambique de un total de 800.000 al año.