DUBLÍN, 24 julio 2001 (ZENIT.org).- El próximo domingo 29 de julio se tendrán momentos especiales de oración por los políticos en todas las parroquias, iglesias y comunidades cristianas de la República de Irlanda y de Irlanda del Norte, justo en el momento en que el proceso político se encuentra en un momento crítico, según informa hoy la Oficina de Comunicación Católica de Irlanda.
Los cuatro principales dirigentes cristianos han pedido a sus comunidades de fe que recuerden en sus oraciones a todos aquellos que tienen que tomar graves decisiones, tales como la respuesta de los dos gobiernos a los recientes debates sobre el futuro político de Irlanda del Norte.
El arzobispo católico Sean Brady dijo: «Animo a todas las personas de buena voluntad a reflexionar sobre el momento crítico que hemos alcanzado en el proceso de paz y a rezar para que Dios guíe a todos aquellos que tienen que tomar graves decisiones políticas en este momento. El futuro a largo plazo y el bienestar de todos nosotros está en juego. El progreso político logrado hasta la fecha debe consolidarse y hay que construir sobre él. La frágil paz que disfrutamos en el presente debe ser reforzada”.
El moderador presbiteriano, doctor Alastair Dunlop afirmó: «Deseo urgir a todos a rezar, para que Dios guíe a todos aquellos que tienen que tomar graves decisiones en este momento. Sigue habiendo brotes de violencia entre las dos comunidades. Se siguen dañando las vidas y las propiedades. Las oraciones del Pueblo de Dios por toda la comunidad son una fuerza para el bien”.
El primado de la Iglesia de Irlanda, arzobispo Robin Eames, declaró: «Mientras que cada domingo se hacen oraciones en las parroquias de la Iglesia de Irlanda por los representantes elegidos, siento que tenemos un claro deber de hacer un llamamiento a nuestro pueblo para que pida a Dios que guíe a todos aquellos que tienen una grave responsabilidad en este momento. La violencia que estamos viendo en nuestras calles, en las que hay tal riesgo para las vidas de los inocentes, incluyendo niños pequeños, debe ser confrontada en el nombre de Dios”.
El presidente de la Iglesia Metodista, reverendo Harold Good, indicó: «Rezando por nuestros representantes políticos y dando fin a la rencorosa violencia sectaria, una paz duradera nos debe conducir a comprometernos a tomar parte en la respuesta a nuestras oraciones”.
