La Comisión de Radio-Televisión y Telecomunicaciones de Canadá (CRTC) anunció la decisión de cambiar su actitud frente a la EWTN, a la que le negó durante varios años el permiso de operar, otorgando sin embargo licencias al canal de Playboy y otros productores pornográficos.
El vocero de la CRTC, Denis Carmel, declaró a la agencia LifeSite que las decisiones previas contra la EWTN se basaron en que «no podrían permitir una programación monorreligiosa». Esta decisión cambió, según Carmel, con un mercado más grande de canales disponibles que incluyen propuestas de otras confesiones.
El permiso de la CRTC, sin embargo, no asegura que los suscriptores de la televisión por cable tengan acceso a la EWTN. La decisión final descansa en las compañías de cable canadienses, que deben optar por incluir a la EWTN en un paquete extra de estaciones al que sus suscriptores deben abonarse como un plus a su servicio regular.