BELGRADO, 18 febrero 2003 (ZENIT.org).- El arzobispo Jean-Louis Tauran, secretario para las Relaciones con los Estados de la Santa Sede, emprendió este martes una visita oficial de tres días a Serbia y Montenegro a invitación del ministro de Asuntos Exteriores, Goran Svilanovic.
La promoción de las relaciones entre Belgrado y la Santa Sede se convirtió en el objetivo principal de un encuentro de dos horas entre el prelado francés y el señor Svilanovic, según informa un comunicado del Ministerio de Serbia y Montenegro, citado por la agencia Tanjug.
«La promoción de la cooperación entre nuestro país y la Santa Sede es una importante contribución a nuestra política europea y a la política que lleva a la estabilización de la paz y al progreso de los pueblos balcánicos», indica el comunicado.
«No podemos ser felices los unos sin los otros y, mucho menos, los unos contra los otros en esta época de graves crisis internacionales», declaró por su parte monseñor Tauran, según el comunicado.
«Seamos como hermanos», añadió el responsable de la diplomacia vaticana antes de asegurar que éste es «el mensaje dirigido por la Santa Sede a los pueblos de esta parte de los Balcanes».
Monseñor Tauran reveló que el miércoles tiene previstos encuentros para promover «programas concretos de cooperación con nuestros hermanos» de la Iglesia ortodoxa serbia. Durante su visita, se encontrará con representantes del patriarcado ortodoxo de Serbia, que a inicios de este mes envió una delegación al Vaticano, que fue recibida por el Papa.
