El texto, que fue aprobado por 70 votos a favor, 10 en contra y 13 abstenciones, precisa que «el Estado reconoce a la Iglesia Católica como elemento importante en la formación histórica, cultural y moral de Perú y le presta su colaboración».

Añade que «el Estado reconoce y respeta a todas las confesiones religiosas y establece acuerdos de colaboración con ellas con criterio de equidad»

La redacción del artículo no sólo ha recibido el apoyo de la Conferencia Episcopal Peruana, sino también del el Concilio Nacional Evangélico, de la Iglesia Anglicana y la Luterana Evangélica, pues el reconocimiento de la Iglesia católica no es excluyente.