Las previsiones iniciales según el número de inscripciones, unas 110.000, estimaban que los participantes serían unos 300.000 jóvenes. Sin embargo, las previsiones eran ya ampliamente superadas a primeras horas de la tarde: cerca de las cinco y media, las cifras que manejaba la policía apuntaban a las 600.000 personas.
A la llegada del Papa, las cifras se acercaban a los 800.000 participantes. Otros datos hablan de cifras aún más elevadas: según miembros de la organización, citando fuentes militares de la base aérea, la cifra sería superior a los 900.000 jóvenes.
A ello habría que añadir la estimación de cerca de 50.000 personas que ha flanqueado el recorrido del Papa hasta su llegada a Cuatro Vientos. En conjunto, las cifras son similares, o incluso superiores, a las de la Jornada Mundial del la Juventud de Toronto, en julio del año pasado.