Monseñor Georges Marovitch ha revelado que la Conferencia Episcopal de Turquía «ha enviado mensajes de pésame y solidaridad a Issak Haleva, gran rabino de Turquía, y al gobernador de Estambul, Muammer Gueler».
En el mensaje al gran rabino, los obispos confiesan que están «sobrecogidos por el dolor y condenan el terrible gesto de violencia y terror».
En el país de mayoría musulmana, en las iglesias de toda confesión y rito se recogieron este domingo en oración y visitaron las sinagogas vecinas, revela la agencia Asia News.