CIUDAD DEL VATICANO, viernes, 22 abril 2004 (ZENIT.org).- Los políticos que favorecen el aborto no deben comulgar y el sacerdote debe negarles la comunión, afirmó este viernes el cardenal Francis Arinze, prefecto de la Congregación para el Culto Divino.
El purpurado nigeriano hizo esta aclaración en una rueda de prensa convocada para presentar la «Instrucción» «Redemptionis Sacramentum» «sobre algunas cosas que se deben observar o evitar acerca de la santísima Eucaristía».
En respuesta a la pregunta de un periodista, el cardenal Arinze respondió: «Si la persona no debería recibirla, entonces no debería dársela. Objetivamente ahí está la respuesta».
Explicó que un sacerdote no debería dar la comunión a un político que favorece el aborto a no ser que la ocasión se presente por sorpresa y «no tenga el tiempo para reflexionar».
Uno de los periodistas preguntó al cardenal si podría ofrecer su juicio sobre la aplicación concreta de esta norma al caso del candidato demócrata a la presidencia de los Estados Unidos, John Kerry, favorable al aborto, quien se profesa católico.
«La norma de la Iglesia es clara –aclaró el cardenal Arinze–. La Iglesia católica existe en Estados Unidos y allí hay obispos. Deje que sean ellos quienes la interpreten».