CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 15 septiembre 2004 (ZENIT.org).- La devolución del Cenáculo de Jerusalén, escenario de la Última Cena de Jesús, por parte del Estado de Israel se realizará si se encuentra un acuerdo entre las Iglesias cristianas de Tierra Santa, ha anunciado un representante del gobierno.
El ministro de Interior, Avraham Poraz, ha revelado al programa «One O Five Live» de «Radio Vaticano» que el lugar en el que tuvo también lugar Pentecostés se convirtió en uno de los argumentos de sus encuentros con representantes vaticanos.
Poraz mantuvo una reunión este martes con la delegación vaticana, guiada por el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado vaticano, y se entrevistó en Castel Gandolofo con Juan Pablo II.
El Cenáculo, aclaró, «estuvo en manos de los católicos hasta hace unos quinientos años, cuando fue tomado por musulmanes», afirma.
«El problema que tenemos ahora es que hay un debate entre las Iglesias en Jerusalén. De modo que les he dicho que sería fácil resolver el problema si se diera un acuerdo entre las Iglesias sobre esta cuestión».
«Si no, he ofrecido incluso mediar para encontrar un acuerdo, pues no podemos aceptar algo que nos provoque conflictos con otras Iglesias cristianas en Jerusalén».
El edificio del Cenáculo está ahora ocupado por una Yeshiva (escuela religiosa hebrea). Hasta 1948 era utilizado por musulmanes. Entre 1335 y 1551 fue el convento franciscano del Monte Sión y sede originaria del Custodio de Tierra Santa.
