CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 11 abril 2005 (ZENIT.org).- Un vídeo realizado por el Centro Televisivo Vaticano fue proyectado este lunes a los periodistas para mostrar los ambientes en los que tendrá lugar el próximo cónclave, que comienza el lunes, 18 de abril.
Se trata, sobre todo, de la Capilla Sixtina, donde bajo los frescos de Miguel Ángel tienen lugar las votaciones para la elección del nuevo Papa, y de la Casa de Santa Marta, la residencia donde, por primera vez, se alojarán los 115 cardenales electores (con menos de ochenta años).
Esta residencia, construida por indicación de Juan Pablo II cerca de la Sala de las Audiencias Generales Pablo VI, de arquitectura sobria, tiene 106 suites, 22 habitaciones sencillas, y un apartamento.
La residencia está atendida por las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl.
El vídeo, tras mostrar cómo son las habitaciones, la capilla, el refectorio, el salón, etc., ilustró el recorrido que realizarán los purpurados hasta llegar a la Capilla Sixtina. En estos trayectos, ninguna persona ajena al cónclave podrá entrar en contacto con ellos.
A continuación se presentaron imágenes de los objetos que caracterizarán a este cónclave, como por ejemplo, las urnas que se utilizarán para recoger las papeletas con el voto de los cardenales.
Hasta el último cónclave, el de 1978, las urnas eran cálices y copones utilizados para este objetivo. Las tres urnas actuales, realizadas por el escultor italiano Cecco Buonanotte, decoradas con símbolos de la tradición cristiana –el Buen Pastor, las espigas, el racimo de uvas, los pájaros– tendrán un objetivo preciso.
Una servirá para recoger los votos de los cardenales presentes en la Capilla Sixtina. Otra se utilizará para recoger en sus habitaciones de la Casa de Santa Marta los votos de los cardenales que por enfermedad no pudieran acceder hasta la Capilla Sixtina. La tercera servirá para recoger las papeletas después del recuento, antes de que sean quemadas.
Los periodistas también pudieron ver en el vídeo imágenes de la estufa que producirá la famosa «fumata», que anunciará la falta de éxito en las votaciones o, si el humo es blanco, la elección del nuevo Papa.
Se trata de una vieja estufa de hierro, de un metro y medio de altura, en cuyo interior tendrán que colocarse todas las papeletas para ser quemadas después de cada votación.
Dado que en la última ocasión, hubo dudas sobre el color de la fumata, se ha anunciado que, en esta ocasión, el humo blanco estará acompañado por el repicar a fiesta de las campanas de la Basílica de San Pedro del Vaticano.