CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 12 septiembre 2005 (ZENIT.org).- Benedicto XVI recibió este lunes en audiencia al rey de Jordania, Abdalá II, acompañado por la reina Rania, en la residencia pontificia de Castel Gandolfo.
Al igual que en los encuentros con jefes de Estado y de Gobierno que el Papa esta teniendo en este mes de septiembre con motivo del inicio de su pontificado, la Oficina de Información de la Santa Sede no ofreció detalles sobre la audiencia.
El joven rey de Jordania refirió al telediario de RAI 1 (canal público italiano de televisión) que los temas en el centro de la discusión fueron la crisis en Oriente Medio y los problemas ligados a la libertad religiosa.
Un comunicado difundido por la Casa Real de Jordania en la víspera del encuentro, citado por la agencia «Petra», aclaraba que la audiencia constituía «una ocasión para promover el diálogo interreligioso y afirmar los valores nobles de la humanidad para combatir el extremismo, el terrorismo y los intentos de dañar la imagen real del Islam».
Jordania, país vecino a Irak, es una de las naciones árabes en las que la minoría cristiana vive en condiciones de tolerancia y respeto.
El 20 de agosto, al encontrarse con representantes de comunidades musulmanas de Alemania, en Colonia, Benedicto XVI había hecho un llamamiento para que el terrorismo y «la oleada de fanatismo cruel» no envenenen las relaciones entre musulmanes y cristianos.
El rey Abdalá II participará en Nueva York, del 14 al 16 de septiembre, en la Asamblea General de la ONU que analizará el cumplimiento de los compromisos de la Cumbre del Milenio, del año 2000, e intentará llegar a un acuerdo sobre la reforma de Naciones Unidas.
El monarca intervendrá con una relación sobre «el papel clave de Jordania para llegar a una paz y una estabilidad regional e internacional».