CIUDAD DEL VATICANO, jueves, 16 febrero 2006 (ZENIT.org).- «Compartimos el pan de la tierra y el pan del cielo» es el tema del Día de Hispanoamérica que se celebrará en las diócesis españolas el domingo 5 de marzo sobre el que reflexiona un mensaje de la Santa Sede.
El mensaje emitido por la Comisión Pontificia para América Latina «recuerda el deber que tenemos de salir al encuentro de dos formas de hambre que hay en el mundo: hambre de pan y hambre de Dios».
El texto ha sido publicado por la Conferencia Episcopal Española y se ha hecho eco del mismo la agencia Veritas
La misiva, firmada por presidente y vicepresidente de la Comisión, el cardenal Giovanni Battista Re y el arzobispo mexicano Luis Robles respectivamente, subraya que «la Eucaristía es sacramento de comunión con Dios y con los hermanos» y constata cómo «a lo largo de los siglos, un río de iniciativas y de obras de caridad a favor de los pobres y los necesitados ha tenido su fuente en el amor a la Eucaristía».
El texto afirma que «una Iglesia misionera, que comparte el don de la fe, es una Iglesia que crece en el amor a Dios y en la solidaridad hacia los demás: lleva Cristo, Pan del Cielo a los hombres, a la vez que les lleva también el consuelo de la ayuda material».
En concreto, el Mensaje señala que «la gesta evangelizadora del Nuevo Mundo tuvo en la Eucaristía su principal sustento» y añade que «la abundancia de obras de caridad realizadas a favor de tantos hombres y mujeres, nos recuerda que la misión de la Iglesia, mientras brote de su unión con Cristo, seguirá dando copiosos frutos».
«También hoy en día, la necesidad material de los países más pobres nos mueve a compartir, pero la fe debe ser siempre el fundamento y el principal objeto de la acción misionera», subraya el texto.
Finalmente, «la Pontificia Comisión para América Latina expresa su deseo sincero de que la celebración del Día de Hispanoamérica sea una ocasión propicia para despertar en todos los corazones la conciencia del llamado misionero y la voluntad de comprometerse con entusiasmo en la gesta de la Nueva Evangelización».
En los materiales preparados por la Comisión Episcopal de Misiones (CEM) para celebrar este día, se recoge el Mensaje así como un comentario sobre el mismo de monseñor Camilo Lorenzo, obispo de Astorga y miembro de la Comisión.
Por su parte, el presidente de la CEM, monseñor Ramón del Hoyo, obispo de Jaén, según informa Veritas, hace en la presentación de estos materiales un recuerdo a «aquellas florecientes comunidades de cristianos evangelizadas en gran parte por quienes no dudaron en salir de nuestros hogares para responder al mandato misionero de Jesucristo».
«No podemos olvidar tan rica historia; debemos apoyar a quienes, en nuestro nombre, continúan hoy esta tarea y preparar su relevo, al tiempo que acogemos y nos enriquecemos de la nueva savia que aportan a nuestras iglesias quienes por el fenómeno migratorio han venido a nuestro suelo».
Monseñor del Hoyo dedica también un amplio espacio a comentar el lema eucarístico elegido para esta jornada y afirma finalmente que «nuestra vocación es compartir el pan de la tierra para que a todos llegue el pan del cielo».
«De nuestro apoyo y credibilidad de los enviados misioneros en aquel continente, depende la credibilidad de nuestras Iglesias ricas en recursos ante aquellas amplias zonas de Iglesias más pobres de pan, pero ricas de amor, que queremos compartir juntos desde la Eucaristía», concluye.