El vicepresidente es el obispo de Bayamo Manzanillo, monseñor Dionisio García Ibáñez.
El nuevo secretario será el recientemente nombrado obispo auxiliar de la Habana, monseñor Juan de Dios Hernández Ruiz, S.J., quien sustituye al obispo Emilio Aranguren Echevarría, nombrado recientemente obispo titular de Olguín en la provincia de Oriente mientas ejerce como Administrador Apostólico de su antigua diócesis de Cienfuegos.
Continúa como secretario adjunto monseñor José Felix Pérez Riera.
Formarán parte, además, del Comité Permanente el arzobispo de La Habana, el cardenal Jaime Lucas Ortega Alamino y el obispo de Olguín, monseñor Aranguren.
Además la Conferencia de Obispos Cubanos ha cambiado su estructura de instancias pastorales quedando organizada en cuatro departamentos, Fe y Misión, Liturgia y Ministerio, Laicos y Cultura y Pastoral Social.
Estos departamentos agrupan a su vez diversas secciones para trabajos específicos que en cierto modo responden al tercer Plan de Pastoral Global que fue presentado antes los fieles al finalizar los actos conmemorativos del veinte aniversario de encuentro Nacional Eclesial Cubano.
Desde aquel encuentro de 1986 han crecido las infraestructuras organizativas de la Iglesia cubana al duplicarse el número de obispos, de siete a 14, al crearse cuatro diócesis nuevas y la provincia eclesiástica de Camagüey y al nombrarse un purpurado para Cuba, el cardenal Ortega.
Existen en la actualidad en Cuba 330 sacerdotes de los cuales 155 son nativos y 126 religiosos. El número de religiosas es 646 de las cuales 130 son cubanas. Son 31 los religiosos hermanos y 29 los miembros de Institutos seculares. Hay en cuba 61 diáconos permanentes, un ministerio que no existía antes de 1986. También se inicia la presencia en Cuba de algún movimiento eclesial de carácter internacional.
Por Araceli Cantero Guibert