CIUDAD DEL VATICANO, domingo, 30 abril 2006 (ZENIT.org).- Benedicto XVI ha propuesto a los creyentes que hagan de este mes de mayo un período para redescubrir el papel de la Virgen María, «madre y maestra» en la vida cristiana.
Recordando que tras la resurrección de Cristo, los apóstoles se reunían junto a la Madre de Jesús, el Papa explicó a mediodía de este domingo, antes de rezar el «Regina Caeli», que María fue para ellos «madre y maestra, papel que sigue desempeñando con los cristianos de todos los tiempos».
«Cada año, en el tiempo pascual, vivimos más intensamente esta experiencia y quizá precisamente por este motivo la tradición popular ha consagrado a María el mes de mayo, que normalmente cae entre Pascua y Pentecostés», consideró.
Por este motivo, el obispo de Roma invitó a redescubrir en este mes «el papel maternal que ella desempeña en nuestra vida para que seamos siempre discípulos dóciles y testigos valientes del Señor resucitado».
El Papa encomendó a María «las necesidades de la Iglesia y de todo el mundo, especialmente en este momento marcado por no pocas sombras».
Por último, invitó a los presentes a invocar la intercesión de san José, a quien la Iglesia recordará mañana como obrero, en especial a favor del mundo del trabajo.
Benedicto XVI comenzará este lunes el mes de mayo visitando por la tarde el santuario del Amor Divino, situado cerca de Roma, para rezar el Rosario (Cf. http://www.santuariodivinoamore.it).