KÖNIGSTEIN, viernes, 21 julio 2006 (ZENIT.org).- Este viernes, en medio de la conflagración entre los movimientos de resistencia libaneses y las autoridades israelíes, el arzobispo melquita católico Elías Chacour de Akka, Haifa, Nazaret y toda Galilea ha lanzado un dramático grito de ayuda.
«Toda la región de Galilea ha quedado prácticamente paralizada; no hay trabajo, no hay circulación y la gente permanece en sus casas a la espera de ser liberada. En su lugar, algunos reciben un proyectil», afirma el obispo en un mensaje distribuido a través de Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN).
«Éste es el caso de los pueblos de Jish, Buqei’a, Fasuta, Tharsheeha, Miilya y también Haifa y Shefar’am, donde la población es, directa o indirectamente, víctima de los proyectiles; algunos están hospitalizados», afirma.
«La mayoría de los hermanos judíos tienen refugios antibombas de los que carecen los poblados árabes, y los demás han escapado a Tel Aviv, algo que los árabes no podemos hacer», añade.
El arzobispo pide ayuda para los directamente damnificados, concretamente, para 30 familias.
Estos cristianos árabes no reciben ninguna compensación del Estado de Israel. «Nunca imaginé que llegaría el día en que tendría que lanzar una especie de SOS para los cristianos de Galilea. Nosotros queremos enjugar las lágrimas de niños y padres en estos tiempos difíciles».
Ayuda a la Iglesia Necesitada (http://www.kirche-in-not.org) ha prometido enviar 15.000 euros para los más necesitados.