ZHOUZHI, jueves, 15 septiembre 2006 (ZENIT.org).- La policía de la provincia de Shaanxi en el norte de China arrestó el 11 de septiembre al obispo católico de Zhouzhi, monseñor Martin Wu Qinjing, por mantener su fidelidad al Papa.
Según informa la agencia AsiaNews.it el arresto tuvo lugar a las once de la noche, cuando unos 30 policías, que llegaron en cuatro coches blindados, se detuvieron ante la parroquia más grande de la diócesis, y al ver que la puerta estaba cerrada, saltaron el muro y despertaron al obispo.
Los agentes con amenazas alejaron a un anciano sacerdote de ochenta años, a cuatro seminaristas y a cuatro religiosas que trataron de detenerles. Al obispo le amenazaron y arrestaron sin presentar acusaciones.
AsiaNews.it, agencia informativa del Pontificio Instituto para las Misiones Extranjeras, citando fuentes católicas locales explica que el obispo se encuentra en estos momentos en paradero desconocido y que no se sabe si las religiosas también han sido arrestadas.
Monseñor Martino Wu Qinjing es obispo de la Iglesia oficial. Fue ordenado sacerdote en octubre de 2005 por el fallecido arzobispo de Xian, monseñor Antonio Li Duan. Su ordenación, aprobada por la Santa Sede, no fue reconocida por el gobierno comunista, que la considera ilegal.
Desde su ordenación, el gobierno le pidió que «no se comportara como obispo», informa AsiaNews.it. Ha tenido problemas con las autoridades en ocasiones públicas, por ejemplo al dispensar el sacramento de la Confirmación.
