TUNJA/BOGOTÁ, miércoles, 27 septiembre 2006 (ZENIT.org).- El presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia ha hecho un llamamiento a los congresistas del país a no dar un golpe más a la familia con la eventual aprobación del proyecto de «matrimonio» entre homosexuales.
De la petición del domingo de monseñor Luis Augusto Castro Quiroga –arzobispo de Tunja- se ha hecho eco la página del episcopado colombiano (http://www.cec.org.co).
Los defensores de tal proyecto, según el prelado, «hablan de patrimonio, pero lo que hay es un matrimonio camuflado no diseñado según el matrimonio católico pero sí según el modelo de las uniones de hecho que el Estado reconoce como matrimonio».
Sus palabras fueron acogidas con aplausos por la multitud que participó en la celebración eucarística del Señor de la Columna en la Plaza de Bolívar de Tunja.
Recordó a los congresistas que todavía están a tiempo de recapacitar y decir no a este proyecto.
«No tenemos nada que decir en contra del patrimonio y de la seguridad social de las personas homosexuales, pero estos son objetivos que se pueden alcanzar sin introducir una figura de matrimonio camuflado y sin dar un golpe más a la estructura familiar», advirtió.
«Recuerden, congresistas, que ustedes tienen una familia y saben del valor de ella; no aporten a su destrucción», subrayó.
Monseñor Castro Quiroga pide a los parlamentarios que no den un golpe más a la famllia en Colombia -célula fundamental de la sociedad, escuela de comunión y semillero de virtudes- por el interés de responder a unos votos que se han ganado y a una porción más de poder que en este caso sería vergonzoso y no una expresión de servicio como debería ser, recoge una nota de la archidiócesis de Tunja.
