En una Declaración titulada «Discernimiento y diálogo en favor de la vida», dada a conocer este jueves en Rancagua, monseñor Goic respondió a las reiteradas consultas periodísticas que se le han formulado a propósito de las últimas informaciones divulgadas en materia de políticas públicas de Salud.
El obispo de Rancagua expresó que, si bien a la Iglesia también le preocupa la realidad social del embarazo adolescente, la normativa hasta ahora conocida pone en peligro vidas humanas ya concebidas y completamente indefensas.
Monseñor Goic también se refirió a declaraciones recientes de autoridades públicas en que se han referido al reforzamiento del compromiso de la familia en la educación de la sexualidad de sus hijos, y también a ciertas formas de consejería, particularmente respecto de la sexualidad y de la fecundidad, en especial de los adolescentes.
«Estos aspectos esenciales debieran tener la primera prioridad tanto para las personas como en las políticas públicas. Es en esto donde se juega la verdadera prevención de los males que se busca superar, mucho más que en las medidas propuestas por las referidas Normas. Pero para que realmente tengan eficacia se requiere que estas tareas sean establecidas sobre la base de la naturaleza y dignidad propias del ser humano, y que sean fruto de un diálogo amplio en que sean escuchados diversos sectores de la sociedad, incluidos aquellos que reflexionan sobre la persona y su sentido trascendente», manifestó el Presidente de la Conferencia Episcopal de Chile.
Finalmente, el pastor exhortó a renovar todos los esfuerzos posibles para fortalecer el diálogo familiar, la educación para el amor, el compromiso y testimonio en favor de la vida y la dignidad de las personas.
Puede consultarse el texto de la «Declaración» en la página web de la Conferencia Episcopal de Chile http://www.iglesia.cl/