GINEBRA, martes, 3 julio 2007 (ZENIT.org).- En tiempos de globalización, es necesario globalizar los derechos humanos, considera la Santa Sede.
Así lo explicó el arzobispo Silvano Maria Tomasi, observador permanente ante las instituciones de la ONU en Ginebra, al tomar la palabra el 20 de junio en la quinta sesión del Consejo de Derechos Humanos.
«Una globalización de los derechos humanos debería armonizar la globalización de la economía, de las comunicaciones, y del movimiento de personas», afirmó.
«La prioridad de los derechos de la persona tiene precedencia sobre consideraciones políticas angostas y sobre las ventajas inmediatas que podrían alcanzarse tolerando la violación de estos derechos».
Según el representante papal, el actual desafío de la comunidad internacional consiste en que el respeto de los derechos humanos se convierta en «la columna del sistema internacional de convivencia y cooperación».
El Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas sustituyó en marzo de 2006 a la Comisión de Derechos Humanos de esa institución.