UDINE, jueves, 12 julio 2007 (ZENIT.org).- Prácticamente la totalidad de los 103 presidentes de los colegios de médicos provinciales de Italia, en representación de más de 400.000 médicos pertenecientes a la Federación Nacional de los Colegios de Médicos, Cirujanos y Odontólogos («FNOMCeO»), han redactado un documento que rechaza claramente cualquier hipótesis de eutanasia.
Ha sido uno de los resultados de la reunión que han mantenido en Udine, del 7 al 10 de julio, para debatir sobre “Ética y final de la vida: itinerarios para decisiones responsables”.
El documento de la «FNOMCeO» no manifiesta ninguna exigencia de una eventual ley sobre el testamento biológico, mientras que pide más apoyo a los cuidados paliativos.
En el documento final del Consejo Nacional de la «FNOMCeO» sobre el final de la vida los médicos italianos “confirman, a nivel de praxis clínica, el respeto de los valores básicos del nuevo Código Deontológico aprobado el 16 de diciembre de 2006”, según el cual el “deber del médico es la tutela de la vida, de la salud física y psíquica del hombre y el alivio del sufrimiento en el respeto de la libertad y de la dignidad de la persona humana”.
En el artículo 11, se lee: “En ningún caso, el médico deberá acceder a peticiones del paciente en contraste con los principios de ciencia y conciencia con el fin de complacerle, sustrayéndolo a los cuidados experimentados y eficaces disponibles”.
En el artículo 16, se afirma que el médico, “teniendo en cuenta la voluntad del paciente donde esté expresada, debe abstenerse de la obstinación en tratamientos diagnósticos y terapéuticos de los que no se pueda con fundamento esperar un beneficio para la salud del enfermo y/o una mejoría de la calidad de vida”.
El “no” a la eutanasia se contiene en el artículo 17: “El médico, incluso si lo pide el enfermo, no debe efectuar ni favorecer tratamientos encaminados a provocar su muerte” ni “puede abandonar al enfermo considerado incurable”.
Al analizar el documento de la «FNOMCeO», la «Asociación Ciencia y Vida» de Italia expresó “gran satisfacción”, sobre todo por lo que se refiere a la posición respecto al testamento biológico.
Según «Ciencia y Vida», el documento de la «FNOMCeO» “elimina, de una vez por todas, el prejuicio difundido por algunos ambientes políticos según el cual la mayoría de los médicos italianos serían favorables a una ley que regule la materia”.
“En el documento de la «FNOMCeO» –subraya una nota difundida el 10 de julio- no se expresa ninguna exigencia implícita de una ley sobre el testamento biológico ni se hacen llamamientos al legislador para que se introduzca en nuestro ordenamiento un instrumento de este tipo”.
“Más bien –prosigue la Asociación- se ve claramente la exigencia de consolidar la alianza terapéutica entre el paciente y el médico, y que se dirijan mayores recursos públicos a los cuidados paliativos, capaces de ayudar a los médicos en el acompañamiento al paciente en las últimas fases de la vida”.
“Además –añade ‘Ciencia y Vida’–, si emergiera una voluntad del legislador de promover una ley en materia de declaraciones de voluntad anticipadas de tratamiento, en los Colegios se formula la petición de una eficaz red de tutela de los sujetos más débiles. Por tanto, una serie de cautelas absolutamente compartibles”.
“En su conjunto, una posición, la asumida por la «FNOMCeO» –concluye la Asociación- que amplía el frente de cuantos, como nosotros, sostienen que no es necesaria una ley sobre el testamento biológico y que entreven en la obstinación con que se persigue este proyecto por parte de algunos sectores de la mayoría del gobierno, un auténtico ‘encarnizamiento terapéutico’ que sería mejor evitar a la sociedad civil italiana”.