BUENOS AIRES, viernes, 20 julio 2007 (ZENIT.org).- La Comunidad de San Egidio organizó este jueves en Buenos Aires una «Peregrinación de la memoria» junto a familiares y amigos de las víctimas del atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), que dejó 85 muertos y cientos de heridos el 18 de julio de 1994.
La peregrinación comenzó en la parroquia Nuestra Señora del Carmen y concluyó en la sede de la AMIA, con el lema: «La herida de la AMIA, es la herida de la ciudad, es la herida del país».
Andrea Elba Poretti, de la Comunidad de San Egidio de Buenos Aires, explica en un mensaje enviado a Zenit que «como Comunidad de San Egidio, movimiento de la Iglesia católica, hemos entablado desde hace muchos años lazos de amistad con la comunidad judía de nuestra ciudad».
«Esta amistad la recibimos como herencia del trabajo que la Comunidad hace desde Roma a muchas otras ciudades de Europa, que en los años de la segunda guerra mundial han vivido bajo el régimen nazi la persecución de los judíos», aclara.
«De la conciencia que quien no tiene memoria del pasado está destinado a repetirlo, cada año, recordando la deportación de los judíos en distintas ciudades Europeas, se hace la Peregrinación de la Memoria, todos juntos, sin distinciones de ningún tipo», añade Andrea Elba Poretti.
«El trabajo por el diálogo, por el conocimiento recíproco que hace caer prejuicios y divisiones, un trabajo que ha crecido a lo largo de los años, nos fortalece en la convicción de que precisamente el diálogo es el único camino para aprender a convivir», subraya.
«Para algunos podrá parecer una debilidad, sin embargo encierra en sí mismo una gran fuerza transformadora de los corazones y las realidades», indica.
«Con Andrea Riccardi, fundador de la Comunidad de San Egidio e incansable artífice de la amistad y de la paz, podemos afirmar que “en esta memoria dolorosa, encontramos la unidad de voluntades y sentimientos de gente de origen distinto, pero que comparte en profundidad un sentido de humanidad, de gran humanidad”».