Obispos australianos reclaman alternativas al aborto

Una ley en Victoria pide la despenalización

Share this Entry

MELBOURNE, viernes, 27 julio 2007 (ZENIT.org).- Los obispos de Victoria, Australia, han enviado una carta al Parlamento de este estado, pidiendo que se rechacen los esfuerzos por despenalizar el aborto.

Candy Broad, miembro de la cámara alta, presentó una ley que permitiría a las mujeres embarazadas el acceso a los servicios de aborto temprano.

El estado de Victoria, situado en el sudeste de Australia, tiene una de las más altas tasas de aborto en el mundo. Uno de cada cuatro embarazos acaba en aborto, bajo la norma Menhennitt de 1969, que permite el procedimiento si está en riesgo la salud mental o física de una mujer.

En la carta de 24 de julio –firmada por el arzobispo Denis Hart de Melbourne y los obispos Peter Connors de Ballarat, Jeremiah Coffey de Sale, y Joseph Grech de Sandhurst–, los prelados dicen que la «moción de despenalizar el aborto sería un retroceso para las mujeres y sus familias».

Los obispos explican: «Quitar al aborto del código penal no puede hacer algo tan falto de ética aceptable».

«Nuestros líderes políticos deberían tratar de encontrar nuevos modos de reducir el alto índice de abortos en Victoria en lugar de correr el riesgo de dar pasos que podrían hacer que el aborto se extendiera más».

Los prelados reclaman alternativas al aborto que se ofrezcan a mujeres con embarazos no planificados.

«Ninguna mujer –escriben– debería tener que elegir entre su propio bienestar y la vida del niño. Pero demasiado a menudo las mujeres expresan el sentimiento de que no tienen otra opción. El aborto se ha convertido en la única ‘opción’ y es un reflejo de que tenemos mujeres que se equivocan».

Los obispos prometen ayuda de los católicos: «La Iglesia ya está trabajando para apoyar a las mujeres vulnerables y sus familias pero queremos hacer más».

«Los católicos están dispuestos a unirse a otros para encontrar nuevas y positivas soluciones al extendido problema del aborto. Reconocemos también que todos los derechos humanos en último término dependen de nuestro amor y apoyo hacia los más vulnerables de nuestra comunidad».

«Condenamos toda violencia contra las mujeres y niños, antes o después del nacimiento –concluyen los obispos–, y hacemos un llamamiento a todos los parlamentarios del estado a rechazar todas las mociones para despenalizar el aborto en Victoria».

Share this Entry

ZENIT Staff

Apoye a ZENIT

Si este artículo le ha gustado puede apoyar a ZENIT con una donación

@media only screen and (max-width: 600px) { .printfriendly { display: none !important; } }