BELÉN, miércoles 17 de diciembre de 2008 (ZENIT.org).- Ante la actual situación de crisis económica y social, el Padre Custodio de Tierra Santa, fray Pierbattista Pizzaballa, invita a los cristianos en su mensaje de Navidad de este año, a «volverse como los pastores» ante el Nacimiento de Cristo, para poder escuchar «el mensaje de esperanza» que éstos escucharon.
El breve y afectuoso mensaje intenta «dar esperanza» a «esta Tierra Santa sufrida y desgarrada», cuya comunidad cristiana sufre en los últimos meses además de modo particular las consecuencias de la crisis económica mundial.
«La dureza de la historia que vivimos intenta aprisionar nuestro corazón con una coraza de hierro, para acabar con la vida. Pero, ¿cómo resistir la tentación de creer que el anuncio sea verdad, que realmente Dios haya entrada en el mundo, que exista una esperanza también para nosotros?», se pregunta.
Para el Custodio, «los tormentos que hoy angustian más brutalmente a la sociedad son de orden económico. Todos, de repente, estamos amenazados por un viento de inseguridad, que sacude los cimientos de cada ilusión de autosuficiencia».
«La sociedad materialista descubre con espanto su fragilidad más profunda. Ser pobre, o poder serlo, se convierte para todos en una posibilidad real. Pero esto es sólo el signo exterior de una pobreza más profunda que aflige el alma. También nosotros nos descubrimos como pastores en la noche», afirma.
Se refirió a la «querida y preciosa tradición» de los franciscanos de la Custodia, que la noche de Navidad peregrinan hasta Belén. «Este año, más que nunca, estamos seguros de no ser los únicos en buscar al Niño», añade.
«Quizá nos falta la simplicidad de los pastores, pero el ansia del corazón y la necesidad de luz son los mismos. También a nosotros se nos ha anunciado el evento que cambia la historia. También nosotros debemos caminar hasta Belén para encontrar respuesta a los problemas que rasgan nuestra alma».
En Navidad, «y especialmente para esta Tierra Santa sufrida y desgarrada, resuena el mensaje que puede renovar el mundo. ¡Venid todos a Belén con el corazón sencillo, y el encuentro con el Niño Jesús borrará todo miedo!¡Aún hay esperanza para todos!», concluye el mensaje.
El mensaje completo puede leerse en: www.custodia.org
Por Inma Álvarez
