BAGDAD, jueves, 21 enero 2010 (ZENIT.org).- El arzobispo de Bagdad, monseñor Jean B. Sleiman, ha hecho un llamamiento para que se rompa el muro de silencio que rodea los asesinatos de cristianos en Irak.
“Rompamos el muro de silencio que rodea los asesinatos de cristianos en Mosul y en Irak”, es el llamamiento lanzado por el arzobispo de Bagdad de los Latinos, monseñor Sleiman, tras los últimos asesinatos, entre el domingo y el lunes, de dos cristianos en Mosul.
“Los cristianos son asesinados en Mosul, mientras que el Estado no hace nada –declaró a la agencia SIR el arzobispo-,- las fuerzas del orden en servicio en los lugares de los ataques y de las matanzas no ven, no oyen, no hablan”.
Una cortina de silencio, según monseñor Sleiman, alientada también por los medios: “Salvo una o dos excepciones, los medios de comunicación permanecen excesivamente silenciosos sobre estos asesinatos”.
El miedo vuelve entre los cristianos que reanudan la fuga del país: “Un nuevo éxodo está por comenzar. Una vez más, los cristianos son sacrificados en el altar de las políticas radicales de este país”.
Desde el 7 de diciembre hasta hoy, en Mosul se han registrado atentados contra diversas iglesias, una estudiante cristiana ha sido raptada, se han producido unos diez homicidios, una bomba destruyó un autobús que transportaba a la escuela a estudiantes cristianos, sin contar las bombas en automóviles en diversos puntos de la ciudad habitados por cristianos.
Por Nieves San Martín