CIUDAD DEL VATICANO, martes 27 de julio de 2010 (ZENIT.org).- Monseñor Antonio Mennini, hasta ahora representante del Papa ante la Federación Rusa, es ya oficialmente nuncio (embajador), tras la presentación de sus Cartas Credenciales al ministro de Asuntos Exteriores, Sergej Lavrov, el pasado 15 de julio.

Según informa hoy la Santa Sede, la ceremonia fue seguida de un cordial encuentro, en el que estuvieron presentes, entre otros, el viceministro de Exteriores, Alexander Krusko.

En su intervención, Krusko quiso relatar el desarrollo de las relaciones bilaterales entre la Federación Rusa y la Santa Sede, que, según recoge L'Osservatore Romano, “se ha caracterizado por una sintonía y espíritu de colaboración crecientes”.

En nombre del Presidente Medvedev, el viceministro de exteriores auguró al primer nuncio en Rusia “una más fructífera colaboración en los grandes desafíos morales y éticos que se plantean al hombre de hoy”.

Por su parte, monseñor Mennini quiso transmitir el saludo del Papa al Presidente ruso, asegurando su “colaboración para un reforzamiento ulterior de las relaciones con el Gobierno, así como para el crecimiento espiritual y moral del pueblo ruso”.

Con este acto termina el intercambio de embajadas, que comenzó el pasado 26 de junio en Roma con la presentación de las Cartas Credenciales del primer embajador ruso ante la Santa Sede, Mikolaj Sadlichov.

Culmina así un largo y difícil camino de acercamiento entre el Vaticano y la Federación Rusa surgida de la antigua URSS. El pasado 3 de diciembre, el Papa Benedicto XVI y el Presidente ruso Dmitri Medvédev, tras encontrarse en el Vaticano, anunciaron el establecimiento de plenas relaciones diplomáticas (ZENIT, 3 de diciembre de 2009).

La Unión Soviética había establecido relaciones diplomáticas con la Santa Sede en marzo de 1990, un año antes de su desintegración, y en enero de 1992 la Santa Sede reconoció a la Federación Rusa como sucesora jurídica de la URSS, estableciendo con ella relaciones a nivel de representaciones permanentes, aunque aún no embajadas.