ROMA, jueves 25 de noviembre de 2010 (ZENIT.org).- Benedicto XVI lamentó ayer el fallecimiento de su colaboradora Manuela Camagni, tras ser atropellada por un coche el martes por la noche en la via Nomentana de Roma.

“El Santo Padre fue informado del triste evento antes de la celebración de la santa misa matutina y elevó por la difunta su oración de sufragio”, informó Radio Vaticano.

Manuela Camagni, de 56 años, era una de las cuatro Memores Domini -mujeres consagradas en el mundo pertenecientes al movimiento Comunión y Liberación- que mantienen el apartamento pontificio.

Camagni se ocupaba especialmente de los apartamentos de los dos secretarios de Benedicto XVI, monseñor Georg Gänswein y monseñor Alfred Xuereb, y del almacén de una modalidad de banco de alimentos constituido por donativos realizados al Papa.

Las cuatro Memores Domini, los dos secretarios y el ayuda de cámara del Papa forman una “familia” que comparte las comidas con Benedicto XVI cuando no tiene invitados y que ahora está en duelo.

Antes de entrar al servicio de Benedicto XVI, Manuela Camagni trabajó para el entonces arzobispo de Túnez, monseñor Fouad Twal, actualmente patriarca latino de Jerusalén.

El accidente se produjo por la noche en la via Nomentana, después de una cena con amigos. El conductor socorrió a la colaboradora del Papa, que falleció en el policlínico Umberto I, a pesar que se le realizó una operación de urgencia en la cabeza.

El alcalde de Roma, M. Gianni Alemanno, expresó su pésame a la comunidad, así como su compromiso de medidas para garantizar mayor seguridad en este gran eje del noreste de Roma.