CIUDAD DE MÉXICO, lunes 7 mayo 2012 (ZENIT.org).- Para la Archidiócesis de México, la corrupción debe ser combatida por todos los candidatos a la Presidencia de la República, por lo que les exhorta, en un editorial, a que, más allá de los debates y estrategias de campaña, hagan frente a este cáncer y sea un tema fundamental en las campañas porque estos actos de impunidad le cuestan al país 32.000 millones de pesos.
El editorial Desde La Fe, publicado por el Sistema Informativo de la Archidiócesis de México (Siame) afirma que México vive una «Corrupción institucional», y así titula el editorial, que incluso alcanza a los candidatos a puestos de elección.
Sin mencionar de forma específica a alguien, afirma el editorial que «desafortunadamente, en las presentes campañas no han faltado algunos candidatos que siguen buscando el apoyo de líderes con sobradas sospechas de corrupción y continúan propiciando abusivamente el esquema del corporativismo sindical con fines electorales, manipulando la decisión política de sus agremiados».
Explica que la corrupción está también entre los líderes sindicales, quienes utilizan como negocio personal la cuotas de los trabajadores agremiados y «convierten abusivamente los sindicatos en un botín político al servicio del mejor postor».
El editorial de la Archidiócesis de México convoca a los candidatos a los distintos puestos de elección a enfrentar esas prácticas. «No podemos esperar tiempos mejores si seguimos propiciando y solapando la corrupción y su impunidad, ya sea en los gobiernos, en los políticos o en los mismos ciudadanos».
Les demanda apegarse a una ética política común que todos debemos asumir como prioridad».
Cita que a partir de las investigaciones de Transparencia Mexicana se contabilizaron 22 millones de actos de corrupción que «terminan por llenar los bolsillos de funcionarios públicos sin escrúpulos» y que podrían destinarse a incentivar el desarrollo social o para abatir la pobreza.
Pero advierte que «en niveles mucho más peligrosos está la corrupción que se da entre algunos políticos o en las mismas fuerzas del orden, donde el poder económico de los delincuentes los pone a su servicio, dejando de lado la responsabilidad de proteger a los ciudadanos, que se quedan indefensos ante toda clase de extorsionadores».
Asegura que a la ciudad de México se debiera «avergonzar» de ser la más corrupta del país por la cantidad de sobornos que se deben pagar para lograr servicios y trámites.
Señala que con sus leyes «inmorales» se ha propiciado «el asesinato de inocentes en el vientre de su madre y ha provocado más de 75.000 víctimas, superando el número de víctimas por la narcoviolencia».
Concluye que la corrupción está en todos los espacios de la vida de los mexicanos, mediante las llamadas «mordidas» para evitar las multas de tránsito o para agilizar un trámite, hasta las pequeñas y grandes empresas que «no tienen empacho en dar un soborno a los inspectores para facilitar las operaciones de sus negocios o para echar a andar nuevas instalaciones».
Para leer el texto completo: http://www.siame.mx/apps/aspxnsmn/templates/?a=7536&z=32.